Un minuto de silencio, por favor...
Un minuto de silencio por el día en que arribaron 3 carabelas al territorio que hoy llamamos San Salvador.
Un minuto de silencio por todas las culturas aborígenes que fueron silenciadas.
Un minuto de silencio por los caídos en aquella eterna batalla.
Yo me pregunto ¿cómo pudieron los aborígenes vivir en territorios aún “no descubiertos”?
Lo que conocemos como descubrimiento de América fue en realidad un atropello contra quienes habitaban nuestra tierra.
Los españoles se tomaron atribuciones que no les correspondían.
Los conquistadores se apoderaron de nuestras riquezas más preciadas: el oro, la plata, la armonía, la cultura y hasta la palabra.
Ellos le pusieron “indios” a nuestros aborígenes.
Llamaron “ciudades” a nuestras comunidades.
Instalaron el castellano como nuestro idioma.
Los españoles vieron en el sur los fogones de los onas, y bautizaron a Tierra del Fuego.
Trajeron consigo nuevas razas, y eliminaron las originales.
Sometieron al trabajo obligado a los auténticos dueños del lugar, quitándoles el derecho de propiedad.
Ellos hicieron desaparecer nuestras raíces.
Un minuto de silencio por los diaguitas, comechingones y sanavirones.
También por los mocovíes, abipones, tobas y matacos.
Un minuto de silencio por los charrúas, guaraníes y querandíes.
Y no olvidemos a los tehuelches, onas y araucanos.
Un minuto de silencio, por favor…
FOTO: www.pasqualinonet.com.ar